jueves, 29 de septiembre de 2011

EL PENSAMIENTO POSITIVO

"La mente intuitiva es un regalo sagrado y la mente racional una sirviente fiel. Hemos creado una sociedad que honra a los sirvientes y que ha olvidado los regalos."

ALBERT EINSTEIN

Todos los pensamientos se manifiestan como energía que vibra a un nivel. Un pensamiento, una vez emitido, es propagado en el espacio y luego recibido o rechazado por otras personas con pensamientos similares. Los pensamientos siempre establecen en el emisor un estado de receptividad para una energía específica del mismo tipo. Por esto es que la vida de una persona es resultado de sus pensamientos. A pesar de las circunstancias, un ser humano siempre posee una fuerza de la cual no siempre es consiente que tiene. Este es el poder formidable de los pensamientos positivos, que lo ponen instantáneamente en resonancia con las benéficas y hermosas fuerzas del Universo.
¿Cuál fue el primer pensamiento que apareció en tu mente esta mañana? Fue un pensamiento bonito, por ejemplo, pensaste en alguien querido, o simplemente te regocijaste de ver el sol en el cielo? Fue un pensamiento negativo, como “estoy tan cansado que no estoy de humor ni para levantarme de la cama?” Recuerda ahora tus próximos pensamientos, el estado general que tienes actualmente cuando comienzas tus actividades.
Puedes notar que la “programación” que imaginas para el día puede hacer que puedas atravesar las dificultades de todo el día, o por el contrario, traerte sólo problemas. Un gran filosofo decía: “En ti esta la causa de todo lo que ocurre en tu vida entera” Cada hombre es artífice de su propio destino, el mismo es el que construye su propia existencia compuesta de luz y oscuridad, subidas y bajadas. Somos los que elegimos nuestras metas y depende de nosotros caer al abismo y subir a las alturas. El eco de nuestra aspiración retumba a nivel de todo el universo, porque “un alma elevada eleva también al mundo entero”.
Entonces permitámonos comenzar cada día con pensamientos positivos. Un pensamiento positivo significa que ampliamos poderosamente el creer en nosotros mismos y en Dios que estará en todas nuestras acciones en armonía con las leyes divinas del universo. Si nos observamos de cerca y a los que nos rodean y observamos su actitud frente a las cosas, notaremos la existencia de tres actitudes diferentes frente a la vida, conectadas muy de cerca con la orientación de los pensamientos: la actitud fatalista-pesimista, la actitud pseudoidealista, y la actitud activa optimista.

La actitud fatalista-pesimista:
“Hombre tonto, creas un gran asombro y no sabes nada del poder formidable de tus pensamientos. Deberías saber que todo lo que imaginas es comparable de manera proporcional a tu fe…….¿Por qué tú no llegas a conocerte y de este modo conocer un Dios perfecto?
Tudor Arghezi
Esta es la actitud que manifiesta un pensamiento cuando se tiene miedo al futuro, el sentimiento de inutilidad, desesperación, cansancio y ansiedad. Es más fácil encontrarse desorientado, infeliz y desequilibrado. Todos seguro tenemos cerca a alguna persona que automáticamente pierde todas sus oportunidades favorables; ellos siempre se ven frente a alguna dificultad, ellos se consideran víctimas de las cirncunstancias que siempre son negativas.
Ellos son los que, al primer obstáculo que encuentran, concluyen: “Yo sabía que no lo lograría!!! No puedo hacer ni cambiar nada!!" Cuando tienen que resolver un problema importante, lo primero que piensan es que ese trabajo no es para ellos. Ellos inmediatamente se vuelven infelices y desinteresados, creyendo fuertemente que en otras circunstancias, otra persona podría resolver el problema más fácil y mas rápido. Por esta razón, la solución del problema va más allá de ellos y empiezan a creer que no podrán resolver el problema.
Todas las cosas buenas que hicieron en el pasado desaparecen frente a una montaña de dificultades. Todo esto comienza por un simple pensamiento negativo. Sin embargo no se puede decir que ellos no desean hacer algo. Muchas veces hemos escuchado gente diciendo “empezaré de nuevo” “mi suerte cambiará” Pronto, a pesar de esto, repiten las mismas actitudes negativas, a pesar de que la situación no se repita. Tendencias conflictivas, la imposibilidad de sobrepasar obstáculos, de ver las situaciones objetivamente, de valorar las cualidades propias, si permanecen en esta situación sin la capacidad de sentir calma interior y armonía, permanecerán así una y otra vez.

La actitud pseudoidealista
“Nada grandioso fue nunca conseguido, excepto por aquellos que realmente piensan que hay algo adentro de ellos superior a las circunstancias”
Bruce Barton
“La mente en su lugar, por sí misma, puede hacer un cielo o un infierno, y un infierno del propio cielo”
Johon Milton

La segunda actitud fundamental está en aquéllos que huyen de las responsabilidades y tienen una tendencia a volar de la realidad a su mundo de ilusión, en donde las responsabilidades diarias y necesidades son ignoradas en nombre de un espíritu superior. En esta categoría tenemos a los filósofos frustrados, los insatisfechos siempre, los soñadores para siempre. Ellos son los que inmediatamente le dan lugar al mal humor. Aquéllos que siempre están pensando en lo que podrían haber tenido, y no hacen nada para volver sus sueños realidad; son aquéllos que se irritan por cualquier cosa, y encuentran defectos en todos los que los rodean, pero nunca se los encuentran ellos mismos.
El pseudoidealista no es otra cosa que una manera falsa de autoprotección, de escapar de la realidad y del propio destino. Ellos tienen una forma pasiva, dejan las cosas al azar, escapan de la realidad en sueños o en un mundo de fantasía que no existe, porque nada fue echo para ellos. No actuar significa, en este caso, el método de acción, pero uno negativo que trae efectos negativos. Si el pseudo idealismo se convierte en un idealismo puro, donde el miedo a la responsabilidad y volar lejos de la realidad se transforman en autoconfianza y fe en la vida, la tercera actitud aparece, la activa optimista. Contemplar se vuelve, en este caso, un modo de pensamiento correcto, de vivir en la verdad, de volverse el mentor del propio destino.
ACTITUD ACTIVA OPTIMISTA
“La historia del mundo es aquella en donde unos pocos extraordinarios creyeron en ellos mismos. Esta autoconfianza se manifiesta en lo divino, que siempre esta detrás nuestro. Un ser humano que cree mucho puede lograr lo que sea. Todo es posible. Tal ser humano solo falla si no hace el esfuerzo suficiente para manifestar el poder infinito del universo. Tu que ahora entiendes podrás ver lo importante que es creer, antes que nada, en el poder de nosotros mismos.”
Swami Sivananda
La tercer actitud fundamental, la activa optimista, esta constituida por todos aquellos que creen que todo alrededor es positivo. La actitud profundamente positiva de sus mentes está firmemente basada en que todo irá bien y que cualquier problema será superado. La vida está llena de circunstancias en las que nosotros no podemos influir directamente. Lo que podemos hacer es modificar la forma en que las observamos. El activo optimista crea un estado positivo del espíritu, capaces de enfrentar todos los efectos y sus influencias, para mejor de todos alrededor de el. Ellos envuelven todas sus relaciones en cariño, afecto, calidez.
Estas personas entienden las dificultades que representan las necesidades de la vida, lo que nos ayuda profundamente a entenderla y a sobrepasar nuestros propios limites. Ellos saben que no son juguetes en las manos del destino, sino los creadores de su propia felicidad. Ellos logran con su actitud permanente de entusiasmo un verdadero arte mientras despiertan sus capacidades para vencer los obstáculos.
Ellos naturalmente usan casi siempre el poder de los pensamientos positivos y siempre actúan para bien, siendo siempre surtidos por las fuerzas benéficas que atraen por resonancia del Macrocosmos. Estas personas están abiertas a todo lo que enriquece el espíritu. Estan listos para aprender todo de todo y creen fuertemente que lo mas revolucionario que pueden hacer en esta vida es ser feliz. Por el simple echo que atraen lo bueno, los eventos y seres alrededor de ellos les devuelven lo mejor.
En otras palabras: DILE SI A LA VIDA Y LA VIDA TE DIRA SI A TI !

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